La dieta mediterránea es el conjunto de hábitos alimenticios que han seguido, durante milenios, las poblaciones ribereñas del mar Mediterráneo. Consiste en una variada y sabia mezcla de alimentos, combinados de  modo tan  peculiar que proporciona todos los nutrientes necesarios para una vida sana. En este resultado final, es fundamental el protagonismo del aceite de oliva, eje fundamental en torno al cual se elaboran la mayoría de los platos de la dieta mediterránea.

Esta importancia del aceite de oliva es indiscutible y depende de sus muchas virtudes, tanto gastronómicas como saludables. Nutricionalmente su mérito esta avalado por ser el aceite de oliva, el alimento que aporta más calorías a nuestra dieta, con lo que es el elemento clave que permite calificar de dieta mediterránea a las costumbres culinarias de países tan distintos como la península Ibérica o el Oriente próximo. Podríamos decir que  la dieta mediterránea no existiría sin el aceite de oliva,  ya que sin el no podríamos  elaborar la mayoría de los platos de la dieta mediterránea. 

El aceite de oliva es un valioso alimento, debido a su riqueza en diversos componentes, entre los que destaca el ácido oléico, , el ácido graso monoinsaturado más importante de la dieta. 

Gracias a nuestro aceite, los menús de nuestra dieta son una equilibrada mezcla de productos, donde cada uno conserva sus propiedades nutritivas, aportando sus mejores fuentes calóricas, sus proteínas, vitaminas, minerales y otros micro nutrientes. Un  buen ejemplo  de esto es la tradicional y saludable costumbre de desayunar pan y aceite o la utilización de aceite de oliva en la preparación de la repostería tradicional.

 

El aceite de oliva es un pilar básico en la dieta mediterranea

 

Dentro de la dieta mediterránea, podemos asegurar que el  aceite de oliva es un elemento básico en la cocina , se puede consumir  de distintos maneras, por ejemplo:

   - En crudo, ya que el aceite de oliva virgen extra conserva todo el aroma y sabor, en ensaladas, salsas o aderezos en verduras. Asimismo, rociado en pan o tostadas o incluso sobre ahumados con aceitunas de mesa, carnes, bocadillos, embutidos, etc.

   - En aliños,  en esto hay que tener en cuenta este importante orden: primero la sal, después el vinagre o el zumo de limón y por último el aceite. El aceite cubre con una capa los ingredientes de la ensalada  evitando que los demás elementos del  aliño penetren en ellos, por eso el aceite es lo último que hay que echar.

   - En rehogados y guisados: A fuego lento y baja temperatura, la cocción se realiza con el vapor que desprenden las carnes, las verduras y el líquido que se les añade, los sabores se mantienen y los aromas se concentran en la cocción. El aceite de oliva virgen mantiene todas sus propiedades, especialmente con legumbres y verduras. 

 

El aceite de oliva se usa en todos los platos de la dieta mediterranea

 

                                   Guiso de la dieta mediterránea, donde uno de sus ingredientes es el aceite de oliva 

                      

   - En asados al horno: Las temperaturas, en especial para las carnes, suelen ser  bastante altas, el aceite de oliva, por su estabilidad ( debido a su contenido oleico), es el más adecuado.

   - En asados a la plancha o a la brasa: El aceite de oliva ayuda a cocer los alimentos, impidiendo  que se  “ peguen”, contribuyendo además  a que la grasa propia del alimento salga y de su propio sabor. En la brasa se puede aromatizar con hierbas, y para conservar mejor el sabor, se debe añadir el aceite al final.

    - En las frituras y asados: El aceite de oliva virgen es la más estable de las grasas vegetales y no produce reacciones tóxicas cuando se le somete a fritura, asado o cocción, en condiciones normales. Más bien todo lo contrario, mejora las cualidades gastronómicas de los alimentos. Al freír, forma una capa fina y consistente alrededor del producto, que impide que absorba más aceite y permite retener todos los jugos. El aceite de oliva fríe y no cuece, como lo hacen otros aceites. Además el aceite de oliva “crece” en sartén, esto es un  importante dato económico.

   

                                    El aceite de oliva es un ingrediente básico de la dieta mediterranea

                                                  Conejo a la brasa. Plato típico de la dieta mediterránea

Además de los incontables platos de la dieta mediterránea, en los que el aceite  de oliva virgen extra, es un  ingrediente esencial, podemos crear con él las más simples, pero sublimes, composiciones.